Santana en Toronto, concierto por la unidad
Isabel Inclan

Toronto, 27 de junio.– El legendario y galardonado guitarrista mexico-americano Carlos Santana se presentó el 26 de junio en el Budweiser Stage de Toronto ante un auditorio que llenó el lugar y le aplaudió y vitoreó de principio a fin.
Acompañado por la banda Counting Crows y por su esposa y baterista Cindy Blackman, Santana deleitó a los asistentes de todas las edades (al menos tres generaciones) con sus éxitos de los años 70s, como Mujer de Magia Negra y Europa, así como con las canciones más actuales.
Su Oneness Tour (La gira por la unidad), producido por Live Nation, comenzó el 14 de junio en Hollywood y recorrerá 29 ciudades, incluida Toronto, antes de concluir en Phoenix en el Footprint Center el 2 de septiembre.
El guitarrista de 76 años y que está celebrando 50 años de carrera artística, tocó sin parar por poco más de 90 minutos.
Vestido con un pants naranja y una playera con el rostro de Bob Marley, el gran Santana encendió las emociones con su inigualable requinto y acompañado de su esposa Cindy quien tuvo momentos estelares con su gran batería.
A la mitad del concierto, Santana tomó el micrófono y dirigió estás palabras a la audiencia, la mayoría jóvenes: “Busquen su propia luz y su propia divinidad”.
Santana agregó que “desafortunadamente, fuimos programados para comportarnos como burros y monos, pero este es el momento de darle la vuelta y pensar con otra mente”.
Con su música de fondo, el autor de Oye Cómo Va y Samba Pa Ti, dijo que “este es el tiempo de pensar con otra mentalidad, donde entendamos que el paraíso no es una condición ni un destino, es una elección”.
“Si me escuchas hablar es porque necesito que conectes con tu propia luz y tu propia divinidad. De esta manera podrás manifestar bendiciones y milagros, y podrás tener una avalancha de abundancia. Así que recuerda, eres precioso, no tienes precio. Valórate a ti mismo”.
Este fue el mensaje que Santana quiso dejar a su paso por Toronto, cuyo público lo aplaudió y cantó sus canciones. El legendario artista, con un caminar lento por el peso de los años, se despidió alzando los brazos y agradeciendo a los artistas que lo acompañaron.